Si bien sigue en lo más alto del Campeonato Nacional Banco Itaú, la Universidad de Chile vio reducida a dos puntos su ventaja con sus más cercanos perseguidores, la U. Católica y Coquimbo, tras empatar sin goles en el Superclásico ante Colo Colo el pasado fin de semana.
De hecho, con ese empate la “U” ahora registra solo una victoria en sus últimos cuatro compromisos de liga, un tramo en el que se quedó sin marcar en dos ocasiones, algo poco común considerando que es el segundo conjunto con más goles del torneo con un total de 31, superado solo por un Deportes Iquique que ha anotado 35.
“A mi criterio hicimos un buen partido, superamos al rival”, fueron las palabras del entrenador de la U. de Chile, Gustavo Álvarez, quien se mostró satisfecho con el rendimiento de su equipo a pesar de no haber podido vencer en casa a su más odiado rival.
Ahora el “Romántico Viajero” saldrá fuera de casa, una condición en la que no ha podido ganar en sus últimas dos expediciones, pero donde ha podido desplegar su mayor potencial ofensivo, anotando incluso el 70.9 % (22) de sus goles totales en este certamen para un promedio de 2.2 goles a favor por partido.
Visitar el Estadio El Teniente también ha sido fructífero para la U. de Chile en las últimas campañas, dado que se llevó la victoria en seis de sus ocho compromisos previos como visitante ante O’Higgins, que llega a esta jornada tras ser goleado 4-1 en casa de Palestino en la fecha pasada.
La presencia del veterano de 35 años Charles Aránguiz también es un impulso para la U. de Chile en la búsqueda de su 19° campeonato. Aránguiz, quien vuelve al equipo después de 11 años, hizo su debut ante Colo Colo el sábado pasado tras entrar en el descanso y jugar toda la segunda mitad.
La Universidad de Chile ha hecho una gran campaña, pero sabe que todavía falta mucho por jugar y que no debe despegar el pie del acelerador si quiere cumplir sus objetivos, y este choque ante un alicaído O’Higgins es la oportunidad perfecta para recuperarse.